Saltar al contenido principal

Una publicación etiquetados con "testimonio"

Ver Todas las Etiquetas

Hoy te escribo a ti y la verdad que no se que decirte. Últimamente pienso poco en ti pero hoy me he puesto la camiseta que me regalaste de Frozen y es inevitable acordarme. Me cabrea que los recuerdos malos ahora mismo son mas altos que los buenos, me cuesta recordar los buenos y también me da pena. Es curioso cómo el tiempo va borrando los recuerdos, apenas me acuerdo de tu cara, tu sonrisa, tus ojos, es como una cara borrosa apenas nítida pero sí que hay ciertos momentos que los tengo en mi mente, los buenos y los malos. Me da rabia que aunque haya pasado más de un año haya días que aún me acuerde de ti, me duelan cosas y quiera saber de ti. Estoy reacciendo mi vida como mejor puedo, estoy pasando un año de mierda pero lo estoy consiguiendo, me he dado cuenta que soy mas fuerte y resiente de lo que pensaba, tengo miedo pero me enfrento a él y eso me enorgullece de mí. Estoy disfrutando de las cosas buenas que me trae la vida, me río, bailo, disfruto de mis amigos, mi perro, hago deporte, me cuido... ,.

Hoy te echo de menos y no sé porqué. Hace un año podría contestarlo pero hoy no, sé que sería imposible volver a intentarlo, hay mucho dolor, miedo, ansiedad. Sé que tienes que estar lejos pero te echo de menos. ¿Por qué? No lo sé. A veces me gustaría saber si tú también piensas en mí de vez en cuando y cómo piensas en mí. La verdad que yo la mayoría de veces que lo hago no es con un buen recuerdo ni con mis mejores palabras, siempre digo que me hiciste mucho daño y se que yo también te hice mal. Nos hicimos mal pero también sé que no tuviste compasión conmigo y yo sí, nunca intentaste ponerte en mi lugar y yo me pasé poniendome en el tuyo. Te daba igual perderme y yo hice todo lo posible para no perderte. Incluso perderme a mi. Pasé a un segundo plano cuando tú eras mi primer y único plano.

Siempre intentaba hacerte feliz, que estuviéramos bien, comunicarnos bien y tú ni lo intentabas, terminaste de la forma más dolorosa conmigo, me senti tan rechaza, pero tan rechazada, que eso aún duele y mucho. Tus últimas palabras me destruyeron, me sentí como una mierda.

Todas aquellas veces que intentaba hacer planes contigo y me lo ponías super difícil, aquel dia que quedamos y me dijiste que alfinal no porque te habia salido otro plan con tu compañera, sentí muchisimos celos, rabia, y dolor. El día que me enteré que estabas saliendo con ella no me lo podía creer.

A veces le doy vueltas pensando cuándo empezó vuestro tonteo porqué sé que fue cuando aún nos veiamos y no sabes lo que me duele pero a la vez me cuadra todo y en parte me da paz porqué sé que no estaba loca.

Fueron muchas cosas es muy poco tiempo, muchas cosas que no me daba tiempo a digerir y yo creo que por eso me cegué y pasaba por alto cosas que ahora lo pienso y me compadezco de mí.

Lo que si agradezco a estas alturas es que ese sentimiento de culpa se me está yendo y menos mal porqué me torturaba. A veces me pregunto si habrás reflexionado sobre nuestra relación pero sé que eso no ha pasado y la única conclusión que tienes es que yo fui la que se cargó la relación.

Ahora que lo pienso, me encantaría poder decirte un dia que fuiste un gilipollas conmigo y decirte las cosas tal y como las siento porque ¿Sabes que? Ahora mismo tengo el valor de hacerlo porque no me da miedo tu reacción, me da igual si me dejas de hablar, si me bloqueas, me da igual que mis palabras te ofendan, me da igual si levanto la voz mas de la cuenta y si te digo cosas feas. Por mi forma de ser sé que después sentiré remordimientos pero también sé que me quedaría bien agusto.

Adios H., de nada por 9 meses de mi tiempo de los que 6 no mereciste.